Presidente brasileño rechaza invitación de Putin y no visitará Rusia

Lula Da Silva dijo que rechazó la llamada debido a "problemas de programación". Ya que no participará en la cumbre del Foro Económico Internacional, que se realizará en junio en San Petersburgo.

El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, dijo este viernes que estuvo hablando por teléfono con el líder ruso, Vladimir Putin, donde en dicha conversación declinó una invitación que el mandatario moscovita le obligó a asistir al Foro Económico Internacional, que se realizará en junio en San Petersburgo.

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Este diálogo tuvo lugar días después de la frustrada reunión de Lula con el presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky. En las redes sociales, Lula dijo que declinó la invitación por problemas de agenda, pero aprovechó la oportunidad para reiterar su disposición a hablar de paz en su conflicto con Ucrania.

En particular, Lula le dijo a Putin sobre "la disposición de Brasil, junto con India, Indonesia y China, para negociar con ambos lados del conflicto (en Ucrania) en busca de la paz". De igual forma, el presidente ha ofrecido a Brasil como mediador en posibles negociaciones para poner fin a la guerra desatada por la invasión rusa a Ucrania en febrero de 2022.

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“Le agradecí (a Putin) la invitación para ir al Foro Económico Internacional de San Petersburgo y respondí que no puedo ir a Rusia en este momento”, tuiteó Lula sobre el evento, programado del 14 al 17 de junio.

Sin embargo, en su momento, Lula fue acusado de ser blanda con el régimen ruso con respecto a su invasión, lo que generó desacuerdos con Zelensky en la cumbre del G7 en Hiroshima, Japón, cuando la reunión bilateral no se llevó a cabo debido a especulaciones sobre "problemas de programación".

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Lula dijo que estaba "molesto" por no reunirse con su homólogo ucraniano, pero también afirmó que no tenía sentido reunirse con Zelensky en este momento porque ni el presidente ucraniano ni Putin dieron señales de buscar la paz.

Desde que asumió el cargo el 1 de enero, Lula ha insistido en que es necesario formular un grupo de países que puedan mediar en un cese al fuego y llevar a Rusia y Ucrania a la mesa de negociaciones. Esta propuesta no encontró respuesta por parte de los países occidentales, que la rechazan, porque creen que el líder brasileño identifica "al país agresor con el país atacado".