Petro ordena suspender el cese al fuego con la guerrilla tras el recrudecimiento de la violencia en el Cauca

Tras los episodios de violencia protagonizados por los bloques de la guerrilla que operan en la zona del Cauca, el presidente de Colombia, Gustavo Petro, ordenó no reanudar el cese al fuego con el EMC (Estado Mayor Central), grupo principal que conforma las disidencias de las extintas FARC (Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia).

La decisión tomada por el jefe de Estado de Colombia fue confirmada por el ministro de Defensa de ese país, Iván Velázquez, tras participar de un Consejo de Seguridad celebrado en el departamento del Cauca, en donde además se ofreció una recompensa de 500 millones de pesos (unos 130.000 dólares) por información que permita la captura de cabecillas de la facción Jaime Martínez del EMC.

"Entre las medidas adoptadas, el jefe de Estado ordenó afectar las finanzas de este grupo ilegal tanto en narcotráfico como en la minería ilegal, en la medida en que con esta estrategia lo que se busca, según explicó el ministro de Defensa, es debilitar a la organización", señala el comunicado publicado en la página oficial de la Presidencia de Colombia.

La orden del Ejecutivo colombiano implica reforzar la presencia de las fuerzas de seguridad en el castigado departamento con 200 policías y 300 efectivos del Ejército colombiano. Cabe mencionar que el Cauca es el bastión principal de los bloques de las disidencias de las FARC que aún responden a alias "Iván Mordisco".

Mientras tanto, el mandatario colombiano se desplazó al municipio de Morales, en donde durante la semana el EMC atacó una estación de policía y acabó con la vida de dos agentes y de dos reclusos que se encontraban en el lugar afectado.

El diálogo entre el grupo armado irregular y el Gobierno de Colombia se encuentra trabado desde hace varios meses debido a incumplimientos por parte de la guerrilla, que continúa con los ataques y actividades ilícitas a pesar de lo acordado anteriormente en las mesas de diálogo para la paz.