Miles de fanáticos en Brasil acompañan a Pelé en su último recorrido

Unas 230.000 personas despidieron al astro del fútbol brasileño. Este martes la procesión fúnebre llevó el ataúd de Pelé por las calles de la ciudad de Santos, incluso pasando por la calle donde vive su madre, Celeste Arantes, de 100 años.

Este martes 3 de enero, tuvo lugar el cortejo fúnebre por las calles de esa ciudad brasileña en dirección al cementerio donde será la última morada del tres veces campeón mundial con la "Canarinha". Asimismo, la procesión, acompañó a la familia y a miles de fanáticos, hasta el panteón Memorial Necrópole Ecumênica, donde se realizó un funeral privado para los allegados del deportista.

LEER MÁS: Tres niños mordidos por murciélagos dieron positivo en rabia en Oaxaca

Las puertas del Estadio Vila Belmiro de Santos, donde se llevaba a cabo el velorio de Pelé, cerraron sus puertas temprano. Considerando que fuera de este, aún había una inmensa fila de fanáticos que esperaban despedirse de la leyenda del fútbol, la cual no pudo acceder, pero si acompañará al cortejo.

Ver esta publicación en Instagram

Una publicación compartida por Diario Latina (@diariolatnews)

En el estadio, estuvo el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, quien llegó para rendir su homenaje. Además de quien, en varias ocasiones se proclamó como un gran seguidor del fútbol y quien se acercó hasta la cancha del club albinegro apenas dos días después de asumir la jefatura del Estado.

LEER MÁS: Tres niños mordidos por murciélagos dieron positivo en rabia en Oaxaca

Cabe señalar que, la seguridad policial se reforzó “mucho” para adaptarse a la presencia del presidente, según señalaron los medios locales. Considerando que más de 230.000 personas asistieron al velorio de Pelé de lunes a martes a las 5 a.m. hora local, según informó este martes la oficina de prensa del Santos Futebol Clube.

El velorio se abrió al público el lunes por la mañana en el Estadio Urbano Caldeira, antiguo campo de juego de Pelé en el Santos, también conocido popularmente como “Vila Belmiro”. En dicho lugar, el feltro se mostró abierto con los restos mortales del triple campeón mundial, acompañado con una bandera del Santos y otra de Brasil, y rodeado de coronas de flores, estuvo escoltado en todo momento por cadetes de la Escuela de Barro Branco de la Policía Militar de Sao Paulo.