Explosión en supermercado de Hermosillo deja al menos 23 muertos y decenas de heridos en México

El sábado 1 de noviembre, una potente explosión sacudió un supermercado Waldo's ubicado en el centro de Hermosillo, capital del estado de Sonora.

De acuerdo con reportes oficiales, 23 personas perdieron la vida y al menos 12 resultaron heridas, en uno de los incidentes más graves registrados recientemente en el norte de México.

"Entre las víctimas hay menores de edad", confirmó el gobernador Alfonso Durazo, quien ordenó una investigación exhaustiva para determinar las causas del siniestro y deslindar responsabilidades.

Hipótesis: accidente por falla eléctrica

La Fiscalía de Sonora informó que la línea principal de investigación apunta a un accidente provocado por un transformador ubicado dentro del local.
"El evento fue aparentemente accidental", indicó el organismo a través de un comunicado en la red X, agregando que los peritos trabajan en el sitio una vez que los Bomberos y Protección Civil aseguraron la zona.

Las labores de rescate se extendieron durante horas, mientras los equipos de emergencia removían escombros y revisaban la estructura del edificio para evitar derrumbes adicionales.

Víctimas y situación de los heridos

Según un informe preliminar, entre los fallecidos se encuentran seis menores de edad, dos mujeres embarazadas y varios empleados del supermercado.
Cinco de los heridos permanecen internados en hospitales locales, algunos en estado crítico, de acuerdo con la Fiscalía estatal.

El estallido ocurrió alrededor de las 15:00 horas, momento en que el comercio estaba lleno debido a la quincena y las compras previas al Día de Muertos. Testigos relataron que tras la explosión, varios clientes quedaron atrapados por las llamas dentro del local.

Reacciones y apoyo oficial

El gobernador Durazo destacó la rápida acción de los servicios de emergencia, mientras que la presidenta Claudia Sheinbaum expresó sus condolencias a las familias de las víctimas y aseguró que su administración brindará apoyo al gobierno de Sonora.
Las autoridades locales suspendieron todas las celebraciones por el Día de Muertos previstas para esa noche y pidieron a la población evitar la zona del siniestro.

Imágenes difundidas por medios locales mostraron la fachada del edificio destruida, con ventanales rotos y un enorme rastro de hollín. Comercios vecinos debieron cerrar para impedir la propagación del fuego.