Ecuador trasladó a 300 presos "peligrosos" tras la masacre en Machala: imágenes y reacciones del gobierno de Noboa

El gobierno de Ecuador trasladó este lunes a 300 reclusos considerados los más peligrosos del país hacia una nueva cárcel de máxima seguridad, horas después de la masacre de 31 presos en el penal de Machala, en la provincia de El Oro.

El presidente Daniel Noboa compartió las imágenes del operativo en sus redes sociales, donde se observa a los internos vestidos con uniformes naranjas, con el cabello rapado y vigilados por militares armados. "El crimen quiso desafiar al Ecuador y el Ecuador le respondió con hechos", escribió el mandatario en su cuenta de X.

La nueva prisión, denominada "Cárcel del Encuentro", se construyó en la provincia de Santa Elena, en un área de difícil acceso. El complejo cuenta con tecnología de control, sistemas de vigilancia y atención médica interna, con el objetivo de evitar traslados y fugas.

Según el ministro del Interior, John Reimberg, el traslado de los presos "se adelantó para impedir nuevos motines", ya que las bandas intentaban frenar el movimiento hacia el nuevo penal. El funcionario aseguró además que la cárcel está equipada con todos los sistemas de seguridad necesarios para impedir el ingreso de objetos prohibidos.

La masacre en Machala, una de las más graves registradas en los últimos años, elevó a más de 500 los reclusos asesinados desde 2021 en distintos penales del país. La violencia penitenciaria se ha atribuido a enfrentamientos entre bandas criminales vinculadas al narcotráfico, que buscan el control de las cárceles.

El gobierno ecuatoriano planea que la seguridad de la nueva prisión esté a cargo de policías y militares retirados, desplazando así a los guardias penitenciarios tradicionales. La medida aún no fue reglamentada oficialmente, pero se enmarca en la estrategia de Noboa para recuperar el control del sistema carcelario.

Con esta acción, Ecuador busca dar una señal de fuerza en medio de la creciente crisis de seguridad que golpea al país y ha puesto en jaque a las autoridades en los últimos años.