En medio de la crisis energética que afecta a ambos países, Colombia decidió desconectar de manera unilateral el sistema de interconexión binacional que mantiene con Ecuador, y dejó al país gobernado por Daniel Noboa al borde de los apagones.

La decisión tomada por Bogotá se da en el marco de la fuerte crisis en el área energética que atraviesa el país, tras la intensificación del fenómeno de "El niño", que ha afectado severamente la generación eléctrica en las represas del país. Ante este escenario, no solamente Quito no podrá importar energía proveniente de Colombia, sino que además enfrenta un serio riesgo eléctrico en su sistema, ya que no podrá acudir a la línea de transmisión del país vecino para equilibrar los voltajes en su sistema eléctrico.

Por su parte, el ministro de Energía de Ecuador, Roberto Luque, reclamó el restablecimiento de la conexión binacional al gobierno de Gustavo Petro, fundamental para evitar apagones en territorio ecuatoriano. "Estamos en conversaciones técnicas entre el operador nacional de energía de Ecuador, el Cenace y el operador colombiano, para reestablecer la conexión lo antes posible", indicó el funcionario de Noboa.

La energía provista por el país vecino resulta fundamental en caso de alguna falla que presente la represa Coca Codo Sinclair, una de las principales del país. En este sentido, la capacidad de intercambio en el sistema eléctrico binacional alcanza los 460 megavatios, es decir el 11% de la demanda máxima de energía.

Aunque de momento, desde el gobierno de Daniel Noboa sostuvieron que buscarán una salida "amistosa" con el gobierno de Gustavo Petro, no se descarta la posibilidad de que Quito pueda acudir a la Comunidad Andina de países (CAN) en protesta por la determinación abrupta y unilateral tomada por Bogotá.